¿Y si eres un TOFI?

En plena epidemia mundial de obesidad no hay que mirar muy lejos para encontrar a la típica persona que se harta de comer porquerías pero no engorda ni un gramo. Que te preguntas por qué has tenido tú la mala suerte de que para una aceituna que te comes, se te queda de por vida encastrada en las caderas. Y ahí está el tío con la bolsa de patatas fritas con crema ácida y cebolla, la hamburguesa de McDonald's que le chorrea el kethup hasta el codo, y un trozo de tarta de chocolate de tres pisos y medio.

Zanahorias. Vale, y un tomate :(  :(  :(

Pero a raíz de un artículo publicado en el periódico "The Guardian", titulado Are you a TOFI?, se ha introducido en la sociedad la definición de un nuevo tipo de individuo que, pese a parecer completamente sano a simple vista, puede esconder serios problemas de salud en su interior, problemas que acabarán haciendo su aparición cuando sea demasiado tarde para poner algún tipo de remedio.


Fuente: Wikipedia

El término TOFI  “thin-outside-fat-inside” (flaco por fuera gordo por dentro) se emplea para describir a individuos delgados con una cantidad desproporcionada de grasa (tejido adiposo) acumulado en su abdomen.

Para definir a un individuo como TOFI es imprescindible medir el contenido interno de grasa en su cuerpo, y la única forma de hacerlo es mediante una resonancia magnética o una tomografía computerizada. Los parámetros del escáner se ajustan de forma que la grasa aparezca de color blanco y el tejido magro en negro. Otros métodos indirectos como medir la circunferencia de la cintura no son válidos, puesto que individuos con las mismas medidas pueden tener niveles muy diferentes de grasa en su interior.

Los individuos identificados como TOFI sufren mayores riesgos de desarrollar resistencia a la insulina y diabetes de tipo 2, además de almacenar gran cantidad de grasa en el hígado.


"Variación de la grasa visceral en individuos con la misma circunferencia de cintura"

Aquí podemos observar otra resonancia de un hombre aparentemente sano y sin signos de obesidad, donde se aprecia en color amarillo la grasa que se acumula dentro de su cuerpo y alrededor de los órganos vitales.

Hora de volver a la dieta mediterránea. O la asiática. O cualquiera elaborada a partir de ingredientes naturales que no hayan pasado por un proceso manipulativo industrial.